FICHA:
Autor: Mario Villén Lucena
Editorial: Edhasa
Género: novela histórica
Páginas: 576
La novela
histórica exige al autor un esfuerzo por conciliar la trama urdida en su mente
con la historia real, pero Mario Villén ha sabido conjugar perfectamente ambas
en su novela de la creación del Reino de Granada. Hay que agradecer al autor
que la obra no sea una novela de “buenos y malos”, sino que todos los
implicados en ella forman parte de ambas figuras, creando unos personajes muy
desarrollados y con una complejidad interior, que permite empatizar con unos y
otros, mostrando que existen muchas conexiones entre los diferentes personajes
que los asemejan más de lo que ellos puedan creer.
La trama
comienza con la derrota cristiana en la batalla de Alarcos de 1195, con un
andalusí que será el primer protagonista de la trama -Aquislula- quien sabrá posteriormente
del nacimiento en Arjona de su primer nieto, Muhammad bin al-Ahmar, en el año
tan glorioso para los andalusíes. La villa de Arjona será el epicentro de la trama
y de las relaciones familiares que se van a ir tejiendo en ella, mostrando el
desprecio de la población autóctona al dominio almohade, que ven como un mal
necesario por la potencia militar de los reinos cristianos. A partir de aquí,
el autor va cimentando el ascenso de los Nasr y los Aquislula, a la vez que la
política ibérica va a ir cambiando según los acontecimientos que se produzcan
en los diferentes reinos. Pese al protagonismo de esas dos familias andalusíes,
el autor va elaborando la trama con personajes situados en diferentes lugares,
como son los infantes de Castilla, el rey leonés, los diferentes dirigentes
musulmanes o los miembros de la orden de Calatrava. Estos personajes irán desarrollando
sus historias, destacando el paralelismo entre el ascenso nazarí y el
castellano bajo Fernando III y la reina madre Berenguela, una gran reina y
política, que garantizó el éxito castellano. Es una novela didáctica, que atrapa
al lector desde el primer capítulo, mostrando una realidad de la época en el
que las fronteras cambiaban de forma sistemática, al igual que las lealtades,
pero donde unos pocos hombres a ambos lados de la frontera seguían un camino
forjándose en la espada y la pluma, bajo unos ideales y creencias firmes, que
consiguieron afianzar sus reinos.
SINOPSIS DE LA EDITORIAL:
UN REINO DE
LEYENDA. EL NACIMIENTO DE UNA DINASTÍA MÍTICA.
Alarcos, 1195.
El ejército musulmán ha derrotado a las tropas lideradas por el rey castellano
Alfonso VIII. La alegría es doble para Asquilula, naqb andalusí: vuelve a casa victorioso y ese mismo día sabe del nacimiento
de su primer nieto: Muhammad bin al-Ahmar.
Corren tiempos
convulsos en la península ibérica, dividida política y culturalmente. En el norte, los reinos cristianos luchan
entre sí; en el sur, musulmán, tampoco reina la unidad. Serán años de batallas
y muertes, traiciones y compromisos, treguas y pactos salpicados con algaradas
e incursiones a uno y otro lado de la frontera. Son tiempos duros en los que la
vida pende de un hilo. Y será en esos años cuando Muhammad bin al-Ahmar, desde
su Arjona natal, se convierta en un fiero cegrí que luchará incansable en la
frontera con Castilla. Aclamado como sayj, encabezó la lucha de su pueblo por
sobrevivir ante los constantes ataques de los reinos cristianos, llegó a ser
nombrado emir y reunió bajo su mano los restos de al-Andalus tras las Navas de
Tolosa. Teniendo como enemigos a sus propios correligionarios y, al norte, al
firme y decidido rey Fernando III el Santo, construyó no sólo un reino, sino
una nueva dinastía, la nazarí, para gloria de al-Andalus y de la Historia. Y en
su camino nunca estuvo solo…
Es ésta una
novela histórica de batallas, de conflictos políticos, de diplomacias y
argucias, pero también de amores, amistad y esperanza. Una novela centrada en
uno de los períodos más convulsos de nuestro pasado, la Reconquista, pero vista
como nunca antes, desde la mirada andalusí. Una novela, en definitiva, sobre un
personaje de leyenda.