FICHA:
Autor: Iñigo Moreno y de Arteaga
Editorial: CSED
Género: Ensayo histórico
Páginas: 284
La presente obra es un gran acercamiento a la política española y de los diferentes territorios bajo la Corona española en el primer cuarto del s. XIX. El autor hilvana con erudición y precisión todos los acontecimientos que fraguaron la independencia de los diferentes territorios continentales españoles en América.
La obra analiza de forma excepcional todos los movimientos diplomáticos que ejerció una debilitada España para mantener en su seno los territorios americanos. Si en los primeros años podría haber habido una solución o al menos una ruptura pacífica, a medida que los años fueron pasando la diplomacia fue debilitándose tanto o más como el país. También es menester traer a colación la actitud inglesa que siendo aliados de España no dudaron en apuñalarla y sacar todo el rédito posible a la situación. Bien es cierto que, de algún modo, quisieron ver una compensación por la ayuda prestada a los rebeldes norteamericanos por la Corona española que supusieron su independencia de Gran Bretaña.
Es muy interesante observar como los realistas y los independentistas, en un primer momento, no estaban tan distanciados. Eran lógicas también las reclamaciones de los criollos que veían afectada su carrera por los privilegios de los que gozaban los peninsulares y los excesos de algunos de ellos en su paso por América. Ese mismo fallo lo cometerían las cortes portuguesas con Brasil. Los portugueses también aprovecharon la ocasión para intentar extender el territorio brasileño hasta el río de la Plata, tomando todo el territorio actual de Uruguay. Si España hubiese podido contar con excelentes negociadores sobre el terreno y aceptar las legítimas aspiraciones de los criollos, o hubiese tenido un ejército y una armada poderosos como los británicos, el devenir seguramente habría sido diferente. También influyó mucho la traición de Riego y otros militares que jugaron a dos bandas o por interés y el último recurso a la fuerza también fracaso, pese a que hubo intentos como los de 1829 de reconquistar Méjico desde Cuba.
El texto contiene a su vez numerosas notas y una gran cantidad de textos de referencia, tanto a pie de página como al final, que ayudan al lector a entender aún mejor esos convulsos momentos.
SINOPSIS DE LA EDITORIAL:
(...) Los demás proyectos de soluciones pactadas lo fueron sin intermediarios, pero la fatalidad quiso que cronómetros ideológicos marcasen contenidos parejos, pero desajustados en el tiempo. La hora política de España, la de las soluciones aceptables, no vino a coincidir con la de América. Nos ha pasado siempre, también respecto a Europa, nos sigue pasando, nos seguirá pasando… En los hechos que se analizan, imposible o descartada en su momento la solución militar como “ultima ratio regis”, a cada fase coyuntural pacifista, corresponde una forma diferente de intentar el arreglo. Panacea universal filosófica, mediación extranjera y cainita, borrón y cuenta nueva paternal, gesto de desarme unilateral… nada sirvió y acaso cualquiera pudo haber servido. Iñigo Moreno lo explica magistralmente y sin circunloquios.
Pocas veces ocurre, ante una obra de las características de la presente, que el lector se sorprende de que haya tenido que pasar tanto tiempo para que a alguien se le haya ocurrido escribirla. Es un síntoma inequívoco de que era necesaria y es oportuna.
