jueves, 28 de octubre de 2021

El viejo Logan

FICHA:

Autor: Mark Millar y Steve McNiven

Editorial: Panini Cómics Marvel

Género: Novela gráfica

Páginas: 240

Traductor: Santiago García y David Fernández Ortega

La edición de Marvel Must Have de Panini recupera una de las más famosas aventuras de Lobezno de la primera década del siglo XXI, con guion de Mark Millar y dibujo de Steve McNiven, originariamente publicada en grapa por Marvel dentro de la colección del mutante de las garras (Wolverine, vol. 3, 66 a 72) y en un ejemplar único titulado de forma homónima a este volumen: El viejo Logan (Old Man Logan).

Este tomo cuenta una distopía de los Estados Unidos donde los villanos se han hecho con el poder y han exterminado a los héroes, hace ya medio siglo, cuyos restos y artefactos han quedado como vestigios de un pasado que no retornará. El país norteamericano aparece dividido por grandes áreas, cada una bajo la dirección de un villano, en un sistema de reparto de tierras muy similar a los señores feudales de la edad media europea. Lobezno, que dejó de luchar y utilizar las garras desde la victoria de los villanos unidos (por ello se hace llamar simplemente Logan), sobrevive con su familia, en la antigua California, de lo que obtiene en su granja, debiendo pagar tributo a los descendientes de Bruce Banner (Hulk). Para poder conseguir dinero con el que satisfacer el la tasa de extorsión impuesta por el villano, Logan emprende un viaje como acompañante de Ojo de Halcón hacia el este, para transportar una maleta con sustancias de contrabando y de este modo ganar el dinero suficiente y poder mantener a su familia. El viaje lo inician en un Spider-Buggy, en un guiño al Spiderman de Gerry Conway, reiterando Logan que ayudará a guiar a Ojo de Halcón, pero que no luchará contra nadie. A partir de aquí comienza una aventura a lo ancho de los extintos Estados Unidos, en el sentido contrario a la expansión desde las 13 colonias originales y el seguimiento de su “destino manifiesto”.

Con un guionista como Mark Millar al mando del proyecto, estando ya versado en un personaje como Lobezno gracias otras obras del mutante como “Lobezno: Enemigo del Estado”, el lector sabe que va a disfrutar de una explosión de aventuras a lo largo de las páginas, no en balde Millar sería un equivalente en el cómic a Michael Bay en el séptimo arte. La narrativa de Millar es dinámica y sostenida a lo largo del tomo, por lo que el lector no tiene un descanso ante el despliegue de acción que va desarrollando el autor. Es una especie de género western moderno, con parajes desérticos y poblaciones hostiles, donde los bandidos campan a sus anchas y no existe un sheriff que proteja a la población, que ha de sobrevivir por si misma en un ambiente hostil, en un retorno a un estado casi presocial donde la locución latina homo homini lupus tal y como lo explicó Hobbes en su Leviatán, está en pleno apogeo. Miller, además, sabe conjugar los diferentes escenarios e ir, a su vez, construyendo el rompecabezas que permite al lector entender por qué fueron vencidos los héroes, y qué sucedió con ellos. Obviamente, sigue un desarrollo clásico para narrar la historia, con su introducción, desarrollo y desenlace donde la épica, que se ha ido fraguando a lo largo de la historia, irrumpe con más fuerza y eclosiona en un final, que no por esperado, deja de desmerecer y deleitar al lector.

El aspecto gráfico recae en un autor solvente y que sabe dar con la tecla necesaria para plasmar en papel las ideas de Millar, siendo este Steve McNiven, con el que ya trabajó previamente en otro crossover impactante de la editorial como fue Civil War. McNiven sigue mostrando su estilo claro y luminoso, pero adaptado para esta historia con una capa pulverulenta con el objetivo de mostrar el angosto camino que ha de recorrer Logan y la suciedad el mismo, impuesto por el barniz decadente de los nuevos dirigentes de la nación. En ningún momento el dibujo de McNiven decae y adapta perfectamente la imagen a los designios del guionista, reforzando aún más la épica y la acción de la narrativa.

En definitiva, El viejo Logan, es un tomo entretenido, bien guionizado y dibujado, que permite al lector experimentado o no, disfrutar de una aventura de Lobezno diferente, pero intensa, apta para ser encuadrada en la saga de “necesidad de tener” de los personajes de las aventuras marvelitas.


SINOPSIS DE LA EDITORIAL:

Hace cincuenta años los héroes cayeron para no volver a levantarse. Pocos sobrevivieron a la purga que la unión de los villanos llevó a cabo. Uno de los pocos supervivientes fue Lobezno, un hombre que ya no responde por ese alias.

Ahora es solo Logan, y Logan ha jurado no volver a matar o hacer daño a otro ser vivo en lo que le quede de vida. ¿Qué pudo ocurrir hace medio siglo para que uno de lo mayores héroes de la historia renunciara a luchar cuando el mundo más lo necesitaba?

Por supuesto, solo el aclamado y vibrante tándem formado por el guionista Mark Millar y el dibujante Steve McNiven tiene la respuesta.

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